El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) ha planteado ante el Ministerio de Igualdad que las personas LGTBI con discapacidad tengan una protección legal reforzada contra la discriminación, al estar expuestas a mayor intensidad de exclusión.
Así lo propone el CERMI en su informe de aportaciones al Ministerio de Igualdad, en el trámite de consulta pública previa de la futura Ley Orgánica para la igualdad de las personas LGTBI y para la no discriminación por razón de orientación sexual, identidad de género, expresión de género o características sexuales. Esta consulta pública está abierta hasta el próximo 15 de julio.
A juicio del CERMI, la norma legal en preparación ha de reconocer a las personas con discapacidad LGTBI como un grupo social y como personas que merecen una especial consideración en el marco de promoción de la igualdad y no discriminación que aspira a establecer la futura Ley, al ser un sector al que históricamente se le ha negado la sexualidad, y sigue en muchos casos en situación de tutela y dependencia de instancias ajenas.
La discapacidad, expone el CERMI, es un hecho que se presta junto con otras causas de exclusión concurrentes, a la discriminación interseccional por lo que ha protegerse más vigorosamente en la norma en gestación, y así expresarse.
De igual modo, en sus alegaciones el CERMI señala que la accesibilidad universal impregne cualquier norma o política pública vinculada con la no discriminación por motivos de orientación sexual, identidad de género, expresión de género o características sexuales, en el caso de personas con discapacidad.
Accesibilidad que debe girar en torno a tres elementos: el diseño universal, las medidas de accesibilidad propiamente dichas y los ajustes razonables. Asimismo, la accesibilidad debe ser entendida, asumida y aplicada en todas sus vertientes: física, cognitiva, actitudinal y a la comunicación.