El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) ha publicado en su colección de libros “Inclusión y Diversidad” una amplia reflexión colectiva con 30 propuestas sobre cómo crear un futuro mejor para las personas y el planeta, desde la perspectiva de la discapacidad organizada.
El futuro es por definición lábil e impreciso. No permite anuncios ciertos ni descripciones anticipadas de lo que será y sucederá, pero esta dificultad no evita que se deje de preguntar incesantemente por él. Y más que interrogar a los tiempos por venir, y mucho menos esperarlos de modo resignado, se trata de contribuir a crearlos; el futuro no puede ser algo que ocurra, sino algo que edifiquemos, las personas, las colectividades y las sociedades. También las personas con discapacidad y sus familias, y las organizaciones en las que se articula el activismo de esta parte de la ciudadanía.
Así lo entiende el movimiento social español de la discapacidad articulado en torno al CERMI, y como aportación a esa construcción de lo que nos va a llegar ha elaborado una publicación que lleva por elocuente título el de Crear un futuro mejor para las personas y el planeta: una reflexión estratégica desde el movimiento asociativo de la discapacidad, que se editado en forma de libro (electrónico y digital).
Redactado por la Comisión encargada dentro del CERMI de la Cooperación e Innovación Asociativas, presidida por Paulino Azúa Berra, producto de un largo y fecundo debate protagonizado por una larga serie de personas y organizaciones cívicas, que tienen en su horizonte de preocupaciones a las personas con discapacidad y sus familias, la publicación plantea treinta propuestas para que el futuro no solo no descarte a esa parte de la familia humana, diversa y plural, que son las mujeres y hombres con discapacidad, sino para que responda en clave de derechos e inclusión a la calidad y calidez que estas demandan.
Sin dejar de denunciar las severas carencias del presente, el movimiento social de la discapacidad, trata de repensar la realidad dada para sobre la misma aplicar grandes dosis de transformación que abran tiempos y comunidades renovadas que permitan a todas las personas desplegar la plenitud de sus proyectos vitales en sociedades tupidas, sugerentes y armónicas, en las que nadie sobre y en las que toda contribución sea bienvenida y celebrada.